bienvenidos
Conectarse
Últimos temas
copyright
Skin diseñada por R. Lena Gallagher. Todo la historia, diseño gráfico e ideas que aquí se exponen pertenecen a la administración. Las imágenes han sido extraídas de sitios como deviantArt. Cualquier copia total o parcial del contenido aquí expuesto será denunciado a las plataformas correspondientes y se procederá de acuerdo al agravo.Sé original, no copies.
Outroduction nightmare ▬ Will. INS.
2 participantes
Página 1 de 1.
Outroduction nightmare ▬ Will. INS.
Listen ma I'll give you all I got. Get me off of this I need confidence in myself. Listen ma I'll give you all of me, give me all of it. I need all of it to myself.after bithaen sorority awards ▬ William H. Sparks
Se deshizo de los altos tacones que había estado llevando toda la noche y se subió completamente sobre la hamaca redonda, llena de cojines y un par de mantas. Soltó un suspiro y cerró los ojos, sintiéndose liberada, pero frustrada. “Necesito unas vacaciones con urgencia.” refunfuñó. Levantó la mirada cuando oyó unas voces cerca de su posición y se limitó a levantar la mano apra despedir a unos conocidos que ya estaban por marcharse de allí a sus casas, dejándoles completamente solos en el jardín.
R. Lena Gallagher• Líder Bithaen • - × Edad : 33
× Mensajes : 1266
× Fecha de inscripción : 27/01/2013
Re: Outroduction nightmare ▬ Will. INS.
Pese a no gustarle ese tipo de fiestas ni en broma, no se lo pasó tan mal, incluso ante la ausencia de su pareja a lo largo de la noche. Se entretuvo demasiado con la gente a la que se acercaba a saludar y con la que charlaba, con el vino que servían y con, desgraciadamente, un baile al que le habían obligado hacer, el cual no duró mucho porque detestaba bailar. Lo que más gracia le hizo fue ganar un premio, que ahora estaba en una especie de mesita a su lado, junto a su chaqueta del traje. Tenía las mangas de la camisa remangadas, y en sus manos había un vaso lleno de vino que se estaba bebiendo con absoluta paciencia. En cuanto vio que la gente empezaba a irse pensó en tomar un poco el aire y disfrutar de estar solo durante un rato. La hamaca que no sabía como se llamaba era cómoda, demasiado. Por eso la había elegido, y ahí estaba. Sentado mientras se mecía ligeramente, bebiendo del vaso de vino. No tenía mucho en lo que pensar, ya que sus preocupaciones parecían haberse ido de viaje, así que se conformaba con tener la mente en blanco, mirando hacia el frente sin ningún punto fijo. Giró el rostro cuando escuchó una voz demasiado conocida para él, negando con la cabeza. —No te odio, boba— murmuró, fijándose en las fresas y en el vino que la rubia traía. —Bueno, espero que cumplas con lo que dices... eres una pésima pareja de eventos— bromeó, dejando que se subiera también junto a él.
—No eres la única que las necesita— añadió. Todos tenían unas ganas tremendas por unas malditas vacaciones, y así dejar de pensar en todo lo que concernía a los estudios y relativos. En cuanto sintió que estaban completamente solos en el jardín se estiró para dejar el vaso de vino sobre la mesita y se acercó hasta ella, rodeándola con los brazos. —Al menos ahora no tienes que seguir haciendo de anfitriona, la gala prácticamente está terminada— tampoco es que le dejaría irse mucho más, ya había sido paciente durante toda la maldita noche.
—No eres la única que las necesita— añadió. Todos tenían unas ganas tremendas por unas malditas vacaciones, y así dejar de pensar en todo lo que concernía a los estudios y relativos. En cuanto sintió que estaban completamente solos en el jardín se estiró para dejar el vaso de vino sobre la mesita y se acercó hasta ella, rodeándola con los brazos. —Al menos ahora no tienes que seguir haciendo de anfitriona, la gala prácticamente está terminada— tampoco es que le dejaría irse mucho más, ya había sido paciente durante toda la maldita noche.
William H. Sparks• Líder Besten • - × Edad : 34
× Mensajes : 1272
× Fecha de inscripción : 11/12/2012
Re: Outroduction nightmare ▬ Will. INS.
Verdaderamente era una pareja horrible y se arrepentía de haberle invitado de acompañante, cuando lo cierto era que más le valía no haberlo tenido. A él no le hubiese costado mucho encontrar a alguien dispuesta a acompañarle, de eso estaba más que segura. Menudo era el señor Sparks. "Tú sí que sabes cómo animarme." se echó a reír sin mucha fuerza porque estaba para el arrastre. Negó con la cabeza y rellenó la copa vacía de vino tinto, echando después un trago. "Pero no te dejaría ir con ninguna otra, tampoco." comentó sabiendo que él haría precisamente eso. Dejó en el aire que se lo tomara por una broma o que iba en serio. Abrió la caja de fresas perfectamente conservadas y mordisqueó una con sutileza; no estaba hambrienta, pero sentía la gula de comer la fruta con el chocolate y ya que habían sobrado, y había trabajado como una mula, se lo merecía.
"Lo sé, todos las necesitamos." y le vendrían a ambos rematadamente bien. Ver como su relación se manejaba fuera de la comodidad de la universidad, verse en situaciones complicadas y de dos personas que no podían apenas convivir juntos o, por el contrario, convivir juntos durante mucho tiempo seguido. Necesitaba un cambio, experimentar, hacer algo que subiera su adrenalina y no matara la relación con el inglés. Dejó la copa sobre la mesita aprovechando que la rodeaba. "Cierto. Ya tienes permitido disfrutar de mi asombrosa compañía." respondió con sorna, llevándole a la boca la mitad de la fresa que ella había mordido primero. Había roto la promesa de no darle jamás de comer, pero suponía que se podía tomar la licencia porque había sido paciente durante toda la noche. Se recostó contra él, acomodando la cabeza sobre su hombro y dejó un ligero beso sobre el cuello de William disfrutando de su agradable y conocido contacto. "Estarás contento, ¿no? Has recibido el premio al mejor sublíder del campus. ¿Cómo te sientes al respecto?" se cachondeó de él, prefiriendo no rememorar el momento en el que le vio subir al escenario para recoger el trofeo. Completamente acomodada contra él, dejó que sus manos vagaran por los antebrazos descubiertos de su novio llenándolos de suaves caricias con las yemas de los dedos.
"Lo sé, todos las necesitamos." y le vendrían a ambos rematadamente bien. Ver como su relación se manejaba fuera de la comodidad de la universidad, verse en situaciones complicadas y de dos personas que no podían apenas convivir juntos o, por el contrario, convivir juntos durante mucho tiempo seguido. Necesitaba un cambio, experimentar, hacer algo que subiera su adrenalina y no matara la relación con el inglés. Dejó la copa sobre la mesita aprovechando que la rodeaba. "Cierto. Ya tienes permitido disfrutar de mi asombrosa compañía." respondió con sorna, llevándole a la boca la mitad de la fresa que ella había mordido primero. Había roto la promesa de no darle jamás de comer, pero suponía que se podía tomar la licencia porque había sido paciente durante toda la noche. Se recostó contra él, acomodando la cabeza sobre su hombro y dejó un ligero beso sobre el cuello de William disfrutando de su agradable y conocido contacto. "Estarás contento, ¿no? Has recibido el premio al mejor sublíder del campus. ¿Cómo te sientes al respecto?" se cachondeó de él, prefiriendo no rememorar el momento en el que le vio subir al escenario para recoger el trofeo. Completamente acomodada contra él, dejó que sus manos vagaran por los antebrazos descubiertos de su novio llenándolos de suaves caricias con las yemas de los dedos.
R. Lena Gallagher• Líder Bithaen • - × Edad : 33
× Mensajes : 1266
× Fecha de inscripción : 27/01/2013
Re: Outroduction nightmare ▬ Will. INS.
Mejor una pareja ausente por ser la anfitriona, que una pareja ausente porque estaba cansada de él. O, por el contrario, mejor que una pareja que estaba todo el rato pegado a William. No se quejaba, en parte. Es cierto que le hubiera gustado disfrutar un poco de su novia en todo lo que duró la gala, quizá una tontería para muchos. Puede que no le pidiera ir a bailar, pero sí un poco de su compañía. Sin embargo, sólo miraba cómo iba y venía de un lado para otro, manteniéndolo todo en orden. Y cuando le preguntaban que dónde estaba su acompañante, el besten sólo se encogía de hombros. —Okay. Acabas de dejarme claro que no podría buscarme otra acompañante, sino que tendría que venir solo— asintió con la cabeza, no conforme con esa afirmación. ¿Y por qué no podría ir con alguien más? Tenía muchas amigas, e incluso podría decirle a Raina, Constance o Kendall de ir a quién sabe donde. —Es una broma, ¿verdad?— arqueó una ceja, esperando que no fuera algo serio.
Aún ni tenía pensado dónde ir en las vacaciones, pero le daba igual. Algo se le ocurriría. Se sorprendió que Lena le diera la mitad de su fresa en la boca, cosa que ni siquiera quiso hacer en la cita de San Valentín, pero no dijo nada al respecto. Abrió la boca y se comió la fresa sin decir nada, dejando que se recostara sobre él. No estaba en todas sus facultades a causa de todas las copas de vino que se había bebido por la noche, pero aún tenía conciencia de todo lo que hacía; el hablar no era dificultoso, y la vista no se le emborronaba. Sólo tenía un puntito, algo que si no te das cuenta ni lo notas. —¿Cómo me siento? Tonto. Subir al escenario es lo peor. Además, no necesitaba un premio... ya sabía que era el mejor de todos— frunció los labios y bromeando con lo último, arrimándose a ella todo lo posible. Observó las caricias, cómo las yemas de los dedos pasaban por sus tatuajes, y soltó un pequeño suspiro, recostándose sobre la hamaca. —Me he sentido algo solito... hasta me han obligado a bailar. Si hubieras estado tú, no me habrían arrastrado hasta la pista de baile— reprochó, jugando con el cabello rubio de su novia.
Aún ni tenía pensado dónde ir en las vacaciones, pero le daba igual. Algo se le ocurriría. Se sorprendió que Lena le diera la mitad de su fresa en la boca, cosa que ni siquiera quiso hacer en la cita de San Valentín, pero no dijo nada al respecto. Abrió la boca y se comió la fresa sin decir nada, dejando que se recostara sobre él. No estaba en todas sus facultades a causa de todas las copas de vino que se había bebido por la noche, pero aún tenía conciencia de todo lo que hacía; el hablar no era dificultoso, y la vista no se le emborronaba. Sólo tenía un puntito, algo que si no te das cuenta ni lo notas. —¿Cómo me siento? Tonto. Subir al escenario es lo peor. Además, no necesitaba un premio... ya sabía que era el mejor de todos— frunció los labios y bromeando con lo último, arrimándose a ella todo lo posible. Observó las caricias, cómo las yemas de los dedos pasaban por sus tatuajes, y soltó un pequeño suspiro, recostándose sobre la hamaca. —Me he sentido algo solito... hasta me han obligado a bailar. Si hubieras estado tú, no me habrían arrastrado hasta la pista de baile— reprochó, jugando con el cabello rubio de su novia.
William H. Sparks• Líder Besten • - × Edad : 34
× Mensajes : 1272
× Fecha de inscripción : 11/12/2012
Re: Outroduction nightmare ▬ Will. INS.
Cuando él se mostraba posesivo con ella, no había nada qué hacer pues no entraba a razones de ningún tipo. Vale, Lena lo aceptaba, pero ¿es que ahora no podía ser ella la que se pusiera posesiva? Claro, la perspectiva no era alentadora. La razón por la que no querría que fuera con otra era muy simple: estaba cansada de aguantar a todas las que iban detrás de él. No eran pocas y se creían que era gilipollas, que no se daba cuenta o algo por el estilo. Se equivocaban. "¿Lo es?" alzó los ojos dejando la duda de nuevo dispersa en el aire. No iba a contestar ni sí, ni no. Por supuesto hubiese habido excepciones a las que no le hubiese importado que William llevara como pareja, pero ¿qué? Eso no cambiaba el hecho de que iba con otra, y no con ella. "No es importante, ¿no? Acabarías haciendo lo que quisieras." y ella no era quién para prohibirle nada; su novia sí, que no su dueña.
Y se lo decía a ella que había tenido que estar un buen rato con un foco en la cara hablando para un montón de personas. No era una persona vergonzosa, en realidad, pero ser el centro de atención no le atraía. Se rió un poco y se sintió cómoda allí recostada, notando el leve balanceo de la hamaca. "El mejor con diferencia..." de los chicos, porque de las chicas Mithian era simplemente fantástica o así lo veía ella. "Todas te votaron, fuiste un voto unánime." se echó a reír. No sabía si le habían votado por sus habilidades o por su físico, empezaba a planteárselo de verdad. Cerró los ojos durante un breve instante y ronroneó completamente a gusto entre los brazos de Will. Sonrió un poco al escuchar su queja, la misma que hubiese hecho un niño pequeño y abrió los ojos, levantando el mentón para poder mirarle durante unos instantes. "Pobrecito mío, le han hecho bailar." hizo un puchero, aunque se podía ver la burla en el brillo de sus ojos y la incipiente sonrisa que decoraba sus labios rojos. "Claro que te hubiesen arrastrado. O peor, me hubiesen arrastrado a mí contigo y habría sido catastrófico." ella odiaba bailar en pareja, así como moverse al ritmo de la música en una discoteca no le importaba, las galas la ponían los pelos de punta. Sabía bailar porque su padre había insistido en que aprendiera, para que su hija fuera su acompañante en los típicas ceremonias militares en honor de quien fuera. "Pero deberías saber que te he visto bailar y que no lo haces tan mal." descendió una de sus manos sobre el tatuaje el forma de clave de fa, deteniéndose ahí haciendo pequeños círculos.
Y se lo decía a ella que había tenido que estar un buen rato con un foco en la cara hablando para un montón de personas. No era una persona vergonzosa, en realidad, pero ser el centro de atención no le atraía. Se rió un poco y se sintió cómoda allí recostada, notando el leve balanceo de la hamaca. "El mejor con diferencia..." de los chicos, porque de las chicas Mithian era simplemente fantástica o así lo veía ella. "Todas te votaron, fuiste un voto unánime." se echó a reír. No sabía si le habían votado por sus habilidades o por su físico, empezaba a planteárselo de verdad. Cerró los ojos durante un breve instante y ronroneó completamente a gusto entre los brazos de Will. Sonrió un poco al escuchar su queja, la misma que hubiese hecho un niño pequeño y abrió los ojos, levantando el mentón para poder mirarle durante unos instantes. "Pobrecito mío, le han hecho bailar." hizo un puchero, aunque se podía ver la burla en el brillo de sus ojos y la incipiente sonrisa que decoraba sus labios rojos. "Claro que te hubiesen arrastrado. O peor, me hubiesen arrastrado a mí contigo y habría sido catastrófico." ella odiaba bailar en pareja, así como moverse al ritmo de la música en una discoteca no le importaba, las galas la ponían los pelos de punta. Sabía bailar porque su padre había insistido en que aprendiera, para que su hija fuera su acompañante en los típicas ceremonias militares en honor de quien fuera. "Pero deberías saber que te he visto bailar y que no lo haces tan mal." descendió una de sus manos sobre el tatuaje el forma de clave de fa, deteniéndose ahí haciendo pequeños círculos.
R. Lena Gallagher• Líder Bithaen • - × Edad : 33
× Mensajes : 1266
× Fecha de inscripción : 27/01/2013
Re: Outroduction nightmare ▬ Will. INS.
Entrecerró los ojos y una mirada de desaprobación fue completamente dirigida a su ahora posesiva novia. Una de las cosas que detestaba en el mundo mundial es que le introdujeran la duda en su cabeza. Que no se quedara conforme con sus respuestas, y que le hicieran dudar de si había dicho lo correcto o no. —Deja de hacer eso— farfulló, picándose un poquito, pero nada más un poquito. Ella en realidad estaba siendo clara con sus palabras, y si él estuviera en su posición seguro que habría sido capaz de hacer que ella misma viniera sin ninguna compañía. —Claro que es importante, Lena. Respeto tu opinión muchas veces aunque parezca todo lo contrario— y si él mismo ni la dejaba aparecerse con un vestido demasiado descubierto, él podría hacerle todo el caso del mundo y venir sin ninguna pareja a la fiesta. Era tan sencillo como eso.
Él pasó un mal rato que duró unos segundos porque, a diferencia de todos, quiso destacar. Y no en el sentido arrogante que podría tener, sino más bien porque él no le daría las gracias ni le dedicaría el premio a nadie. Todas las personas que le votaron ya sabían de sobra que había ganado gracias a ellas. No era una persona emotiva, más bien reservada y por una vez algo nerviosa entre tanta gente, por lo que no faltó su gran comentario que hizo reír a más de uno. —¿Enserio fue unánime?— preguntó, con una mezcla entre curiosidad y sorpresa. Eso sí que no se lo esperaba. Tampoco conocía a todas las bithaen como para que fueran a votarle cuando ni siquiera habían visto su labor de sub-líder. Más que nada, hizo lo que pudo suplantando a Evan en lo posible por sus ausencias, nada más. Perfectamente el reconocimiento pudo haber sido para otro, en vez de a él. Rozó la nariz de ella contra la suya cuando Lena levantó el mentón, sabiendo que se estaba burlando de él por esa queja de niño pequeño. —A mí no me habría importado verte bailar con esos taconazos. Pondría el cronómetro para ver cuando tardarías en caerte ante cualquier canción movidita de Maroon 5— bromeó, besando su mejilla instantes después. Alzó ambas cejas, pensando que no le había visto por el hecho de que estaba de un lado a otro, intentando que la gala fuera lo mejor posible. —¿Me has visto? Mierda— respondió, cediendo totalmente a su pequeña caricia sobre el tatuaje de su muñeca.
Él pasó un mal rato que duró unos segundos porque, a diferencia de todos, quiso destacar. Y no en el sentido arrogante que podría tener, sino más bien porque él no le daría las gracias ni le dedicaría el premio a nadie. Todas las personas que le votaron ya sabían de sobra que había ganado gracias a ellas. No era una persona emotiva, más bien reservada y por una vez algo nerviosa entre tanta gente, por lo que no faltó su gran comentario que hizo reír a más de uno. —¿Enserio fue unánime?— preguntó, con una mezcla entre curiosidad y sorpresa. Eso sí que no se lo esperaba. Tampoco conocía a todas las bithaen como para que fueran a votarle cuando ni siquiera habían visto su labor de sub-líder. Más que nada, hizo lo que pudo suplantando a Evan en lo posible por sus ausencias, nada más. Perfectamente el reconocimiento pudo haber sido para otro, en vez de a él. Rozó la nariz de ella contra la suya cuando Lena levantó el mentón, sabiendo que se estaba burlando de él por esa queja de niño pequeño. —A mí no me habría importado verte bailar con esos taconazos. Pondría el cronómetro para ver cuando tardarías en caerte ante cualquier canción movidita de Maroon 5— bromeó, besando su mejilla instantes después. Alzó ambas cejas, pensando que no le había visto por el hecho de que estaba de un lado a otro, intentando que la gala fuera lo mejor posible. —¿Me has visto? Mierda— respondió, cediendo totalmente a su pequeña caricia sobre el tatuaje de su muñeca.
William H. Sparks• Líder Besten • - × Edad : 34
× Mensajes : 1272
× Fecha de inscripción : 11/12/2012
Re: Outroduction nightmare ▬ Will. INS.
Poco le valían las miradas desaprobatorias de William cuando ella no tenía ganas de hablar de más de las cosas que le pasaban actualmente por la cabeza. Simplemente quería dejar las cosas como estaban porque nunca se había considerado celosa o posesiva, pero también era cierto que nunca antes había tenido novio. Hasta hacía unos meses le daba igual cuantas chicas coquetearan con Will, cuantas estuvieras coladitas por sus huesos o con cuantas se iba a pasar el día. Ahora, le empezaba a hinchar las narices todas y cada una de esas personas a las que apenas conocía y se tomaban libertades. "Hay cosas que me molestan. Y ya está. No es el fin del mundo, puedo vivir con ello." de momento, y si no pudiera simplemente lo arreglaría.
Había estado durante una semana preguntándose qué narices iba a hacer cuando Sparks subiera a por su premio. Comiéndose la cabeza incesantemente, sabiendo que no podía actuar de forma extraña porque era una de las anfitrionas de la velada. Fue por eso por lo que decidió que fuera Mithian la encargada de darle el premio, porque ella no se iba a ver capacitada sin parecer idiota. "Sí, lo fue. El único voto en el que todas estuvimos de acuerdo." sonrió con cierta gracia. ¿Qué iba a hacer? ¿Llorar? No, porque de verdad se merecía ese premio pese a que posiblemente no todos los votos fueron por la razón adecuada. Suspiró al notar el roce con su nariz, sintiéndose absurdamente embriagada todavía a esas alturas del partido. Habían tenido tiempo de cansarse el uno del otro, pero no parecía que fuera a pasar en un presente muy cercano. "Que bonito, así que querías verme comerme el suelo." le dio un pellizco en el brazo a modo de "recompensa". "Ni que nunca me hubieses visto en la discoteca bailando con tacones igual de altos." el caso era que jamás se había fijado, posiblemente. Lena no se consideraba una bailarina excepcional, pero sabía moverse y a más de uno había atraído así. "Durante medio minuto, en realidad, pero sí te he visto." y sintió cierta calidez cuando le vio bailar, sintiendo ganas de ir allí y obligarle a bailar una lenta también con ella. Pero dos cosas se lo impidieron: su cordura y un incesante pitido en su Ipad. "¿Te has dado cuenta de que parecemos unos moñas aquí tumbados abrazados bajo la luz de las estrellas?" comentó con irrisorio retintín por sus palabras cursis y poéticas.
Había estado durante una semana preguntándose qué narices iba a hacer cuando Sparks subiera a por su premio. Comiéndose la cabeza incesantemente, sabiendo que no podía actuar de forma extraña porque era una de las anfitrionas de la velada. Fue por eso por lo que decidió que fuera Mithian la encargada de darle el premio, porque ella no se iba a ver capacitada sin parecer idiota. "Sí, lo fue. El único voto en el que todas estuvimos de acuerdo." sonrió con cierta gracia. ¿Qué iba a hacer? ¿Llorar? No, porque de verdad se merecía ese premio pese a que posiblemente no todos los votos fueron por la razón adecuada. Suspiró al notar el roce con su nariz, sintiéndose absurdamente embriagada todavía a esas alturas del partido. Habían tenido tiempo de cansarse el uno del otro, pero no parecía que fuera a pasar en un presente muy cercano. "Que bonito, así que querías verme comerme el suelo." le dio un pellizco en el brazo a modo de "recompensa". "Ni que nunca me hubieses visto en la discoteca bailando con tacones igual de altos." el caso era que jamás se había fijado, posiblemente. Lena no se consideraba una bailarina excepcional, pero sabía moverse y a más de uno había atraído así. "Durante medio minuto, en realidad, pero sí te he visto." y sintió cierta calidez cuando le vio bailar, sintiendo ganas de ir allí y obligarle a bailar una lenta también con ella. Pero dos cosas se lo impidieron: su cordura y un incesante pitido en su Ipad. "¿Te has dado cuenta de que parecemos unos moñas aquí tumbados abrazados bajo la luz de las estrellas?" comentó con irrisorio retintín por sus palabras cursis y poéticas.
R. Lena Gallagher• Líder Bithaen • - × Edad : 33
× Mensajes : 1266
× Fecha de inscripción : 27/01/2013
Re: Outroduction nightmare ▬ Will. INS.
Según la rubia tenía un par de chicas detrás. Y él o era idiota o no se daba cuenta de ello, ya que él no veía a ninguna que al menos quisiera algo más de lo debido. De todas formas, si de verdad quisieran algo no sería algo que podría aceptar con gula, más que nada porque ahora mantenía una relación estable y sabía las consecuencias de sobra. Qué podía hacer y qué no. Algunas veces sabía que a Lena le llegaban a molestar, otras las ignoraba. Él, en parte, no buscaba realmente todo esto, sino más bien que actuaba como siempre. En parte entendía su molestia, ya que él se enfadaría el doble incluso si tuviese a un par detrás. —Hasta que explotes— añadió, frunciendo levemente el ceño. —Cuando te moleste algo que me involucre, siempre puedes decírmelo. Lo sabes, ¿no?— tal vez algunas cosas se negaría, pero otras no le importaría modificarlas para que no se molestara.
Una de las cosas que más raras le parecieron fue que Lena no se acercara a darle el premio, ni nada así. Más bien, fue Mithian quién lo hizo. Sin embargo, no le pareció mal. Es decir, seguro que se verían como dos tontos porque todo el mundo sabían lo que eran, y seguramente esperaban algo más que un gracias, o algo así. Ni tampoco podría darle más importancia que al resto sólo por ser su novio, así que al menos le agradeció no haberle hecho pasar el mal trago peor aún. —¿De verdad?— seguía sin creérselo aún, porque joder, el único voto unánime y en cual todos se pusieron de acuerdo. Era difícil siempre que muchos estuvieran de acuerdo con otros, así que le sorprendió. —Pues me lo mereceré, entonces— murmuró sin pizca de seguridad alguna. Fingió que aquel pellizco le dolió, soltando el típico ''au'' que cualquiera decía cuando le pillaba por sorpresa. —Si te levanto del suelo cual caballero gano puntos— se encogió de hombros. Y sí, quería verla caerse con los tacones. No era con mala inteción, seguro que ella también querría verlo en el suelo. Se quedó pensativo, pero en ningún momento se acordó de haberla visto con tacones tan altos, que consiguieran más o menos ponerle a su altura... tal vez porque se fijaba más en otras zonas que en los pies. —No me acuerdo. Estaba entretenido con otras cosas. Aunque bueno, no le pongo pega. Con los tacones tan altos no tengo que agacharme para besarte— algo bueno tendría, pese a que tarde o temprano le terminarían doliendo los pies. No dijo nada más sobre haberlo visto bailar por vergüenza, más que nada. Durante un instante miró hacia arriba y algunas nubes dejaban de ver un par de estrellas. Solos, estrellas, abrazados... vale, algo de moñas tenía. Frunció los labios. —¿Y qué? Digo, no nos ve nadie. Estamos solo tú y yo, y el día que deje ser delito abrazar a mi propia novia, entonces dejaré hacerlo. O tal vez no—
Una de las cosas que más raras le parecieron fue que Lena no se acercara a darle el premio, ni nada así. Más bien, fue Mithian quién lo hizo. Sin embargo, no le pareció mal. Es decir, seguro que se verían como dos tontos porque todo el mundo sabían lo que eran, y seguramente esperaban algo más que un gracias, o algo así. Ni tampoco podría darle más importancia que al resto sólo por ser su novio, así que al menos le agradeció no haberle hecho pasar el mal trago peor aún. —¿De verdad?— seguía sin creérselo aún, porque joder, el único voto unánime y en cual todos se pusieron de acuerdo. Era difícil siempre que muchos estuvieran de acuerdo con otros, así que le sorprendió. —Pues me lo mereceré, entonces— murmuró sin pizca de seguridad alguna. Fingió que aquel pellizco le dolió, soltando el típico ''au'' que cualquiera decía cuando le pillaba por sorpresa. —Si te levanto del suelo cual caballero gano puntos— se encogió de hombros. Y sí, quería verla caerse con los tacones. No era con mala inteción, seguro que ella también querría verlo en el suelo. Se quedó pensativo, pero en ningún momento se acordó de haberla visto con tacones tan altos, que consiguieran más o menos ponerle a su altura... tal vez porque se fijaba más en otras zonas que en los pies. —No me acuerdo. Estaba entretenido con otras cosas. Aunque bueno, no le pongo pega. Con los tacones tan altos no tengo que agacharme para besarte— algo bueno tendría, pese a que tarde o temprano le terminarían doliendo los pies. No dijo nada más sobre haberlo visto bailar por vergüenza, más que nada. Durante un instante miró hacia arriba y algunas nubes dejaban de ver un par de estrellas. Solos, estrellas, abrazados... vale, algo de moñas tenía. Frunció los labios. —¿Y qué? Digo, no nos ve nadie. Estamos solo tú y yo, y el día que deje ser delito abrazar a mi propia novia, entonces dejaré hacerlo. O tal vez no—
William H. Sparks• Líder Besten • - × Edad : 34
× Mensajes : 1272
× Fecha de inscripción : 11/12/2012
Re: Outroduction nightmare ▬ Will. INS.
Alzó ambas cejas, dudando mucho que explotara en un futuro cercano. Por suerte o por desgracia Rebecca tenía demasiado temple. No era de las que simplemente a la primera de cambio soltaba cuatro gritos y ponía todo patas arriba. No. No era su forma de ser. Así que por el contrario, se mantenía impertérrita frente a los problemas y los afrontaba con el mentón alto, dejando que todo la resbalara hasta el punto de la indiferencia. Ni qué hablar de las personas y los gélidos silencios que podía levantar la Gallagher en cuestión de segundos. "No te voy a lloriquear, si es lo que me estás insinuando." le miró con severidad. No quería ser una novia quejica que veía demasiados fantasma y ataba en corto al chico. "Cuando hagas algo que de verdad me duela, te enterarás." quizás de la manera más cruel, pero sin duda alguna lo haría. "Pero sí, lo sé." << y tú sabes que no lo haré >> pensó. Una pequeña sonrisa carente de felicidad o cualquier otra emoción apareció en sus labios a modo de compensación.
Volvió a asentir. ¿Por qué le parecía tan extraño? Después de todo había sido uno de los mejores sublíderes, considerando la situación tan complicada que había tenido Evan entre manos. Criar una hija en la universidad no había sido el movimiento más inteligente por parte de su mejor amigo, pero ella -y Will, entre otros- habían estado ahí para ayudarle a llevar a cabo la diligencia. "Lo has hecho bien, no te restes valor." murmuró y besó el mentón de su novio con orgullo. Se mojó los labios y le observó con aire burlón. "No te daría puntos conmigo. Quizás con una desconocida y para llevártela a la cama." se mofó. Ni que él fuera un caballero con su flamante armadura y su caballo blanco. Pero reconocía que tendría su gracia, si le pasara a otra persona y no a ella. "Querrás decir con otras." le corrigió. No era ningún secreto que durante su amistad William se había ligado a un sinfín de tías delante de ella y nunca había pasado nada, así que en realidad sería sorprendente que siquiera se hubiese fijado un poco en ella. Eso no iba a hacer que se sintiera menos. "Sólo que no has podido disfrutar mucho de esa ventaja." reconoció porque apenas sí había estado con él. Levantó la mirada hacia el cielo y contuvo una mueca, como si se sintiera repentinamente observada, así que viró los ojos hacia las ventanas de la casa esperando encontrarse el rostro de alguna morada loca por Will, pero no había nadie. Todo era silencio y el tiritar de la luz de las velas que había apostadas por la casa. "Sería más acertado decir que el día que deje de ser tu novia dejarás de abrazarme." se arrebujó contra él, cerrando los ojos en el proceso y se quedó durante unos instantes así, en silencio. De nuevo dejó lentas caricias sobre la piel de sus brazos y manos, sintiendo arder las yemas de sus dedos ante el continuo contacto. De repente abrió los ojos y clavó la mirada en un punto fijo en la lejanía y soltó la noticia, la decisión que había tomado con respecto a su futuro y, en parte, el de ambos. "Me quedo en Evesham dos años más, he rechazado el resto de ofertas académicas."
Volvió a asentir. ¿Por qué le parecía tan extraño? Después de todo había sido uno de los mejores sublíderes, considerando la situación tan complicada que había tenido Evan entre manos. Criar una hija en la universidad no había sido el movimiento más inteligente por parte de su mejor amigo, pero ella -y Will, entre otros- habían estado ahí para ayudarle a llevar a cabo la diligencia. "Lo has hecho bien, no te restes valor." murmuró y besó el mentón de su novio con orgullo. Se mojó los labios y le observó con aire burlón. "No te daría puntos conmigo. Quizás con una desconocida y para llevártela a la cama." se mofó. Ni que él fuera un caballero con su flamante armadura y su caballo blanco. Pero reconocía que tendría su gracia, si le pasara a otra persona y no a ella. "Querrás decir con otras." le corrigió. No era ningún secreto que durante su amistad William se había ligado a un sinfín de tías delante de ella y nunca había pasado nada, así que en realidad sería sorprendente que siquiera se hubiese fijado un poco en ella. Eso no iba a hacer que se sintiera menos. "Sólo que no has podido disfrutar mucho de esa ventaja." reconoció porque apenas sí había estado con él. Levantó la mirada hacia el cielo y contuvo una mueca, como si se sintiera repentinamente observada, así que viró los ojos hacia las ventanas de la casa esperando encontrarse el rostro de alguna morada loca por Will, pero no había nadie. Todo era silencio y el tiritar de la luz de las velas que había apostadas por la casa. "Sería más acertado decir que el día que deje de ser tu novia dejarás de abrazarme." se arrebujó contra él, cerrando los ojos en el proceso y se quedó durante unos instantes así, en silencio. De nuevo dejó lentas caricias sobre la piel de sus brazos y manos, sintiendo arder las yemas de sus dedos ante el continuo contacto. De repente abrió los ojos y clavó la mirada en un punto fijo en la lejanía y soltó la noticia, la decisión que había tomado con respecto a su futuro y, en parte, el de ambos. "Me quedo en Evesham dos años más, he rechazado el resto de ofertas académicas."
R. Lena Gallagher• Líder Bithaen • - × Edad : 33
× Mensajes : 1266
× Fecha de inscripción : 27/01/2013
Re: Outroduction nightmare ▬ Will. INS.
—No estoy pidiendo que lloriquees— aclaró, para que no hubiesen malentendidos. Sabía de sobra que ella era de silencios y de indiferencia más que de insultos y golpes. Era más fácil una mirada envenenada que una palabra mal dicha, y que el orgullo era más cercano que la propia rabia. Tampoco esperaba que se convirtiera en una paranoica que viera cosas donde no había nada, ni tampoco en una celosa que no le dejaba estar con nadie. Ya existió alguien así en su vida, y no quería repetir la experiencia. De todas maneras, tampoco quería que lo llenara todo de indiferencia y se callara, y que encima después le viniera con algún acto cruel o algo así, cosa que no es que le hiciera especial gracia. —Uh, qué bien— añadió, más en un tono sarcástico que otra cosa. Alzó ambas cejas ante su sonrisa carente de nada, ni de expresión suficiente como para conformarle. —Sí, sabes que no me lo vas a decir— bufó, evitando molestarse por ello.
Se le escapó un pequeño ronroneo ante el beso en el mentón, terminando por sentirse algo orgulloso. Premio y, encima, afectos de su novia. ¿Qué más podía pedir? Bueno, quizá más fresas. Se estiró un poco para llegar a la caja de fresas, intentando no molestar mucho a Lena con su movimiento y volvió a su sitio, llevándose una fresa a la boca con gusto. —Qué poco sentido del humor— que se llamara igual que un príncipe no significa que en la vida llegara a serlo, quizá un caballero oscuro o algo así. ¿O Batman? Molaría ser Batman. —Vale, lo admito... con otras. O con tu culo, eso también servía— vamos, que no era idiota. Lena estaba buena y que fuera su amiga en aquellos tiempos no significa que no se fijara en ella ni que le regalara miraditas de reojo cuando no se daba cuenta. Es cierto que muchas veces ligaba con chicas y llegó a dejarla de lado de vez en cuando, pero también existía para sus ojos. —Bueno... la disfruto ahora, que estás conmigo. No con los tacones puestos, pero sí sentada a mi lado— añadió, antes de besar sus labios durante un instante. Bajó una hilera de besos hasta su cuello, hasta finalmente parar en su hombro. —Hmmm... vale, es cierto. Eres la única que me ha visto mimoso, siéntete afortunada— verificó, atribuyendo al silencio. La rubia acariciaba con la yema de los dedos su brazos, la nariz de Will rozaba su espalda con total lentitud. Sin embargo, detuvo sus caricias nada más escuchar la noticia. No podía decir que la idea no le gustó, porque más bien le encantó. No se iba a ir a Australia, y ya no tendría que hacer largos viajes para tener que verla. Una sonrisa apareció en sus labios sin poder evitarlo, y agradeció que no lo estuviera viendo en ese instante. —Genial, ¿no?— intentó fingir naturalidad, conteniendo sus ganas de comérsela allí mismo.
Se le escapó un pequeño ronroneo ante el beso en el mentón, terminando por sentirse algo orgulloso. Premio y, encima, afectos de su novia. ¿Qué más podía pedir? Bueno, quizá más fresas. Se estiró un poco para llegar a la caja de fresas, intentando no molestar mucho a Lena con su movimiento y volvió a su sitio, llevándose una fresa a la boca con gusto. —Qué poco sentido del humor— que se llamara igual que un príncipe no significa que en la vida llegara a serlo, quizá un caballero oscuro o algo así. ¿O Batman? Molaría ser Batman. —Vale, lo admito... con otras. O con tu culo, eso también servía— vamos, que no era idiota. Lena estaba buena y que fuera su amiga en aquellos tiempos no significa que no se fijara en ella ni que le regalara miraditas de reojo cuando no se daba cuenta. Es cierto que muchas veces ligaba con chicas y llegó a dejarla de lado de vez en cuando, pero también existía para sus ojos. —Bueno... la disfruto ahora, que estás conmigo. No con los tacones puestos, pero sí sentada a mi lado— añadió, antes de besar sus labios durante un instante. Bajó una hilera de besos hasta su cuello, hasta finalmente parar en su hombro. —Hmmm... vale, es cierto. Eres la única que me ha visto mimoso, siéntete afortunada— verificó, atribuyendo al silencio. La rubia acariciaba con la yema de los dedos su brazos, la nariz de Will rozaba su espalda con total lentitud. Sin embargo, detuvo sus caricias nada más escuchar la noticia. No podía decir que la idea no le gustó, porque más bien le encantó. No se iba a ir a Australia, y ya no tendría que hacer largos viajes para tener que verla. Una sonrisa apareció en sus labios sin poder evitarlo, y agradeció que no lo estuviera viendo en ese instante. —Genial, ¿no?— intentó fingir naturalidad, conteniendo sus ganas de comérsela allí mismo.
William H. Sparks• Líder Besten • - × Edad : 34
× Mensajes : 1272
× Fecha de inscripción : 11/12/2012
Re: Outroduction nightmare ▬ Will. INS.
Tener que decirle a una persona todas las cosas que le hacían sentir mal, para ella era lloriquear. Las palabras no puedo, estaban fuera de su vocabulario desde que tenía uso de razón; su padre se había encargado de ello. Cuando las fuerzas te dejaban, tenías que encontrarlas en otro sitio y no parar, pues nadie salvo uno mismo iba a estar al final del día para mantenerte en alza. El ejército era duro, creaba personas que se podían valer por sí mismas y así era Lena. Sonrió irónica. "Tienes razón, no lo haré." respondió sin un ápice de vergüenza, pese a todo. "Olvídalo. Sabes cuando estoy molesta y cuando no, si me pasara algo no te diría nada. Sería mentir y sabes que no lo hago." en cualquier omitir información, pero nunca decirle una mentira. Así que cambiaría directamente el curso de la conversación y le distraería con cualquier otra cosa.
Tenía mucho sentido del humor, pero estaba tan agotada que hasta reírse le costaba horrores. Se movió un poco para dejarle que cogiera las fresas y se rió, aunque no lo suficiente como para soltar una carcajada. "¿Mi culo?" frunció el ceño creyéndoselo a medias. No es como si no le hubiese dicho antes que se había fijado en ella desde el primer momento, pero de ahí a que siempre bajara la vista hasta esa parte de su anatomía la pilló un poco de sorpresa. "Y yo que pensaba que sólo me mirabas al escote cuando estudiábamos juntos..." se cachondeó de él, haciéndole saber que le había pillado infinidad de veces, pero que había omitido cualquier comentario. Todo para que no se hiciera raro seguir juntos encerrados durante horas en la biblioteca o cualquier parte. Como una tonta acabó sonriendo con las palabras de Will y giró el rostro para que sus labios se encontraran durante un escaso instante. Ahora quería más, pero se contuvo relamiéndose el sabor a fresa y chocolate que le había dejado el beso. Y los restantes no ayudaron mucho, pero se dejó hacer, ladeando el cuello para dejarle espacio. "Hmmmmm... muy afortunada, sí..." arrastró las palabras, notando como se le erizaba la piel con cada beso y una conocida y agradable sensación tomaba su cuerpo. Sólo que no duró tanto como quería, y estuvo por protestar, pero había sido ella con su noticia la que le había hecho parar. No le estaba mirando, pero se imaginaba la sonrisa triunfal que debía de decorar sus labios. "Pensé que estarías más contento..." rezongó, girándose ligeramente para mirarle con una maliciosa sonrisa. "¿Y se puede saber por qué has parado? No te he dicho que lo hagas..." susurró mordiéndose el labio con cierto coqueteo.
Tenía mucho sentido del humor, pero estaba tan agotada que hasta reírse le costaba horrores. Se movió un poco para dejarle que cogiera las fresas y se rió, aunque no lo suficiente como para soltar una carcajada. "¿Mi culo?" frunció el ceño creyéndoselo a medias. No es como si no le hubiese dicho antes que se había fijado en ella desde el primer momento, pero de ahí a que siempre bajara la vista hasta esa parte de su anatomía la pilló un poco de sorpresa. "Y yo que pensaba que sólo me mirabas al escote cuando estudiábamos juntos..." se cachondeó de él, haciéndole saber que le había pillado infinidad de veces, pero que había omitido cualquier comentario. Todo para que no se hiciera raro seguir juntos encerrados durante horas en la biblioteca o cualquier parte. Como una tonta acabó sonriendo con las palabras de Will y giró el rostro para que sus labios se encontraran durante un escaso instante. Ahora quería más, pero se contuvo relamiéndose el sabor a fresa y chocolate que le había dejado el beso. Y los restantes no ayudaron mucho, pero se dejó hacer, ladeando el cuello para dejarle espacio. "Hmmmmm... muy afortunada, sí..." arrastró las palabras, notando como se le erizaba la piel con cada beso y una conocida y agradable sensación tomaba su cuerpo. Sólo que no duró tanto como quería, y estuvo por protestar, pero había sido ella con su noticia la que le había hecho parar. No le estaba mirando, pero se imaginaba la sonrisa triunfal que debía de decorar sus labios. "Pensé que estarías más contento..." rezongó, girándose ligeramente para mirarle con una maliciosa sonrisa. "¿Y se puede saber por qué has parado? No te he dicho que lo hagas..." susurró mordiéndose el labio con cierto coqueteo.
R. Lena Gallagher• Líder Bithaen • - × Edad : 33
× Mensajes : 1266
× Fecha de inscripción : 27/01/2013
Re: Outroduction nightmare ▬ Will. INS.
En parte en ese aspecto, era como él. No iba decir qué le molestaba, qué le dolía o qué pasaba. Su independencia le prohibía decir nada. Sólo cuando llegara a estar en el suelo y necesitara obligatoriamente una ayuda, la pediría. Sin embargo, a diferencia de Lena, si le tocaban las narices no iría con indiferencia, al menos con hombres. Si algún tío aparecía y le mosqueaba, no se iba a quedar de brazos cruzados... por mucho que los golpes siempre fueran su última opción. —El problema es que cuando sé que te pasa algo, lo ignoras y me cambias de tema— cuando está claro que a él le gustaría saber qué demonios le pasa. Pese a ello, estaba claro que no iba a obtener respuesta alguna.
Asintió con la cabeza. Tenía ojos, y sabía utilizarlos. Si se pensaba que él sólo se fijaba en el interior, lo llevaba claro. Siempre habían dicho que primero te fijas en lo que los ojos te muestran, y si eso luego te molestas a conocer en la persona. ¿Era superficial? No, para nada. —Tu culo, sí— contestó, con una sonrisilla burlona en los labios. No era tan difícil de adivinar, ¿no? Sólo habían dos zonas comunes donde fijarse. Alzó una ceja, sintiendo que le habían pillado. No era tan descarado en ese aspecto, es más, intentaba ser lo más discreto posible. —¿Desde cuando la gente normal se pone escote cuando estudia? Es normal que me fijara— se excusó, en su defensa. Tampoco es que las suyas fueran precisamente pequeñas, no era su culpa que se fijara en ellas. Más sorpresa se llevó él al descubrir el piercing. Sabía que le gustaba el camino de besos sobre su cuerpo, más si se centraba en el cuello y en el hombro, donde ella admitió que le gustaba aún más. Igualmente, no era la única que sentía que se le erizaba la piel ante cualquier caricia, más bien a él le ocurría lo mismo. —Sí, bueno... estoy contento— siguió fingiéndo naturalidad, como si la sonrisa ayudara a no ser delatado, cosa que era más bien todo lo contrario. Se quedó mirándola durante unos segundos cuando giró el rostro, fijándose en que se estaba mordiendo el labio. —No te muerdas el labio— puntualizó, porque sabía de sobra que lo estaba tentando demasiado. Sin embargo, en vez de volver a los besos en el cuello, más bien se centró en las caricias. Una de sus manos, por ejemplo, recorrió la pierna descubierta por el vestido. —Así que quieres que siga...—
Asintió con la cabeza. Tenía ojos, y sabía utilizarlos. Si se pensaba que él sólo se fijaba en el interior, lo llevaba claro. Siempre habían dicho que primero te fijas en lo que los ojos te muestran, y si eso luego te molestas a conocer en la persona. ¿Era superficial? No, para nada. —Tu culo, sí— contestó, con una sonrisilla burlona en los labios. No era tan difícil de adivinar, ¿no? Sólo habían dos zonas comunes donde fijarse. Alzó una ceja, sintiendo que le habían pillado. No era tan descarado en ese aspecto, es más, intentaba ser lo más discreto posible. —¿Desde cuando la gente normal se pone escote cuando estudia? Es normal que me fijara— se excusó, en su defensa. Tampoco es que las suyas fueran precisamente pequeñas, no era su culpa que se fijara en ellas. Más sorpresa se llevó él al descubrir el piercing. Sabía que le gustaba el camino de besos sobre su cuerpo, más si se centraba en el cuello y en el hombro, donde ella admitió que le gustaba aún más. Igualmente, no era la única que sentía que se le erizaba la piel ante cualquier caricia, más bien a él le ocurría lo mismo. —Sí, bueno... estoy contento— siguió fingiéndo naturalidad, como si la sonrisa ayudara a no ser delatado, cosa que era más bien todo lo contrario. Se quedó mirándola durante unos segundos cuando giró el rostro, fijándose en que se estaba mordiendo el labio. —No te muerdas el labio— puntualizó, porque sabía de sobra que lo estaba tentando demasiado. Sin embargo, en vez de volver a los besos en el cuello, más bien se centró en las caricias. Una de sus manos, por ejemplo, recorrió la pierna descubierta por el vestido. —Así que quieres que siga...—
William H. Sparks• Líder Besten • - × Edad : 34
× Mensajes : 1272
× Fecha de inscripción : 11/12/2012
Re: Outroduction nightmare ▬ Will. INS.
La conversación le estaba dando dolor de cabeza, en parte porque ya lo tenía un poco de antes y por otro lado porque no estaba segura de que fueran a llegar a nada. Él también ignoraba las cosas, a medias, y vale que no utilizaba la indiferencia, pero Rebecca era así. La única solución es que ella cediera y le hiciera partícipe de las cosas que le molestaban, pero estaba segura de que ese movimiento sería peor que ignorarlo. "¿Y qué quieres? " enarcó una ceja escéptica, sacudiendo ligeramente la cabeza. No necesitaba una respuesta, porque sabía que obviamente ninguno de los dos eran de muchas palabras y cuando tenían que contarse algo -después de mucha reticencia- lo hacían, aunque les pesara. "Si necesitara contarte algo, lo haría." como había hecho otras veces, aunque quizás no fuera en el momento adecuado. Sólo había que recordar la conversación sobre su beca en Australia o la de Viena.
"Genial, encima sólo te gusto por mi físico." bromeó. Evidentemente no era del todo cierto, o eso suponía. A Rebecca le había llamado físicamente Will cuando le vio, eso era obvio, pero sí que podía decir que poco a poco la persona le fue calando hondo. No es que simplemente quisiera conocerla porque estuviera bueno, en realidad le hubiese dado igual, pero tenía que admitir que era un plus. "Y ahora te metes con mi ropa. ¿Qué pretendías que fuera con cuello vuelto? ¿A la biblioteca? El lugar más caluroso de todo Evesham." reprochó. Realmente parecía que en la biblioteca siempre estaba puesta la calefacción. Era espaciosa y por tanto las corrientes de aire del exterior iban y venían, por lo que no era un pensamiento alocado, ni mucho menos. Pero tenía que reconocer que ella también le miraba de reojo más de una vez y que su aroma a chocolate la incitaba de mala manera. "Ya lo notó, sí..." más contento de lo que realmente estaba demostrando con sus palabras. Y bastaba que le dijera de no hacer algo para que fuera ella y lo repitiera. Y no sólo eso, si no que además de seguir mordisqueándose el labio, al final pasó su lengua por él incitadora. "¿Así?" preguntó maliciosa. Sin embargo, su juego fue prácticamente fulminado cuando la mano de Will acabó sobre su pierna, dejándola por un momento sin respiración. Bajó la mirada hacia la abertura de su vestido rojo e intentó mantener la compostura, claro, se tenía que hacer la dura o no tenía gracia. "Ajá..." echó la cabeza hacia atrás, posándola de nuevo sobre el hombro del moreno, sintiendo que se le contraía el estómago a medida que él ascendía más por la pierna, pero no apartó la mirada del cadente recorrido de su mano. "Debería dejar de comprar vestidos que te faciliten este tipo de tareas." murmuró en un ronroneo divertido.
"Genial, encima sólo te gusto por mi físico." bromeó. Evidentemente no era del todo cierto, o eso suponía. A Rebecca le había llamado físicamente Will cuando le vio, eso era obvio, pero sí que podía decir que poco a poco la persona le fue calando hondo. No es que simplemente quisiera conocerla porque estuviera bueno, en realidad le hubiese dado igual, pero tenía que admitir que era un plus. "Y ahora te metes con mi ropa. ¿Qué pretendías que fuera con cuello vuelto? ¿A la biblioteca? El lugar más caluroso de todo Evesham." reprochó. Realmente parecía que en la biblioteca siempre estaba puesta la calefacción. Era espaciosa y por tanto las corrientes de aire del exterior iban y venían, por lo que no era un pensamiento alocado, ni mucho menos. Pero tenía que reconocer que ella también le miraba de reojo más de una vez y que su aroma a chocolate la incitaba de mala manera. "Ya lo notó, sí..." más contento de lo que realmente estaba demostrando con sus palabras. Y bastaba que le dijera de no hacer algo para que fuera ella y lo repitiera. Y no sólo eso, si no que además de seguir mordisqueándose el labio, al final pasó su lengua por él incitadora. "¿Así?" preguntó maliciosa. Sin embargo, su juego fue prácticamente fulminado cuando la mano de Will acabó sobre su pierna, dejándola por un momento sin respiración. Bajó la mirada hacia la abertura de su vestido rojo e intentó mantener la compostura, claro, se tenía que hacer la dura o no tenía gracia. "Ajá..." echó la cabeza hacia atrás, posándola de nuevo sobre el hombro del moreno, sintiendo que se le contraía el estómago a medida que él ascendía más por la pierna, pero no apartó la mirada del cadente recorrido de su mano. "Debería dejar de comprar vestidos que te faciliten este tipo de tareas." murmuró en un ronroneo divertido.
R. Lena Gallagher• Líder Bithaen • - × Edad : 33
× Mensajes : 1266
× Fecha de inscripción : 27/01/2013
Re: Outroduction nightmare ▬ Will. INS.
Tampoco quería seguir del todo con esa conversación, porque hasta él estaba consiguiendo un dolor de cabeza con el tema. El problema persistía en que tenía algo de alcohol en el cuerpo y su terquedad iba en aumento. Su objetivo era quedarse conforme con la situación, que fuese algo beneficioso para el uno y para el otro. Pese a ser así de cerrados, al menos ella debería saber que podía contar que él, porque no era un desconocido ni nada parecido. Era su novio, con el que había compartido más que palabras. Sabía que existían cosas que eran difíciles de contar, pero a lo que él se refería no era nada complicado. —No sé si de verdad lo harías— como, por ejemplo, lo del violín. Si su padre no hubiera sacado el tema, probablemente él nunca habría sabido nada. Pero no la culpaba, porque él tampoco habría dicho nada de su pasado si ella no hubiera descubierto la caja en su armario.
—Si me gustaras sólo por tu físico no habríamos llegado tan lejos— si sólo fuera por eso, ahora mismo estaría su nombre grabado en su lista y no habría querido saber nada de ella nunca más, a no ser que fuese totalmente beneficioso para él. No solía estrechar relaciones de confianza con ninguna de las chicas con las que se acostaba, aunque siempre había pequeñas excepciones. Esas excepciones, sin embargo, no estaban en su lista. Un ejemplo claro, era Kendall. —Sé que es un sitio caluroso... pero madre mía como ibas— hizo un gesto con la mano con un poco de exageración. Si ya desde hace tiempo se sentía atraído hacia ella, pues no estaba de mal alimentar los ojos con tremendas vistas. Encima no se sentaban el uno delante del otro, sino más bien al lado... por lo que existían veces en los que se rozaban el brazo y entre eso y el escote se terminaba sofocando en la maldita biblioteca. Hasta que un día se le ocurrió la gran idea de estudiar fuera, al aire libre. Volvió a estirarse ésta vez para coger el vaso de vino que antes tenía y terminándoselo entero de un trago por tentarlo desde la mesa. Bufó cuando ella le retó, mordiéndose más a un el labio y relamiéndoselo. A consecuencia de ello, William se acercó y se adelantó a morderle el labio inferior -sin hacerle daño- mientras su mano juguetona danzaba peligrosamente por su pierna. En cuanto echó la cabeza hacia atrás se centró de nuevo en su cuello, dejando pequeños mordiscos en vez de los besos suaves de antes. —Deberías dejar de tentarme tanto con esos vestidos. Luego estamos solos y ya no puedo controlarme—
—Si me gustaras sólo por tu físico no habríamos llegado tan lejos— si sólo fuera por eso, ahora mismo estaría su nombre grabado en su lista y no habría querido saber nada de ella nunca más, a no ser que fuese totalmente beneficioso para él. No solía estrechar relaciones de confianza con ninguna de las chicas con las que se acostaba, aunque siempre había pequeñas excepciones. Esas excepciones, sin embargo, no estaban en su lista. Un ejemplo claro, era Kendall. —Sé que es un sitio caluroso... pero madre mía como ibas— hizo un gesto con la mano con un poco de exageración. Si ya desde hace tiempo se sentía atraído hacia ella, pues no estaba de mal alimentar los ojos con tremendas vistas. Encima no se sentaban el uno delante del otro, sino más bien al lado... por lo que existían veces en los que se rozaban el brazo y entre eso y el escote se terminaba sofocando en la maldita biblioteca. Hasta que un día se le ocurrió la gran idea de estudiar fuera, al aire libre. Volvió a estirarse ésta vez para coger el vaso de vino que antes tenía y terminándoselo entero de un trago por tentarlo desde la mesa. Bufó cuando ella le retó, mordiéndose más a un el labio y relamiéndoselo. A consecuencia de ello, William se acercó y se adelantó a morderle el labio inferior -sin hacerle daño- mientras su mano juguetona danzaba peligrosamente por su pierna. En cuanto echó la cabeza hacia atrás se centró de nuevo en su cuello, dejando pequeños mordiscos en vez de los besos suaves de antes. —Deberías dejar de tentarme tanto con esos vestidos. Luego estamos solos y ya no puedo controlarme—
William H. Sparks• Líder Besten • - × Edad : 34
× Mensajes : 1272
× Fecha de inscripción : 11/12/2012
Re: Outroduction nightmare ▬ Will. INS.
Tendría que esperar hasta el momento adecuado para saber si lo haría o no. Había, no obstante, aspectos de la vida de Lena a los que ella no quería entrar, ni profundizar. Sabía que poco a poco tendría que abrirse a Will, que sin darse cuenta, le dejaría ir encajando las pequeñas piezas de su particular puzzle. "Si te gustara sólo por mi físico te daría una patada, William." respondió sin miramientos. Ella no se consideraba superficial y no le gustaba, ni le hacía gracia, la gente que lo era. Además estaba resabido que de ser algo sólo físico, su nombre estaría en una libreta que sabía que tenía. Si es que no eran varias. Empezaba a darse cuenta, ahora, de lo exagerado que era a veces el Besten o lo salido que estaba. No sabía por cuál de las dos decantarse. "No iba de ninguna manera." frunció el ceño, pensando en las camisetas que solía usar. Sí, tenían algunas escote y otras no tanto, pero no era un verdadero escote en el que enseñaba demasiado. "Lo que tú tienes es una imaginación horrible y todo te incita." contestó con burla. Llegó un momento en el que simplemente se juntaban a estudiar en invierno porque él salía a los jardines y ella prefería estar en un sitio tranquilo. Pero se había sucedido esa tensión sexual durante cuatro largos años hasta que simplemente estalló de la manera más absurda.
Le observó beber y por un momento ella también deseó hacerlo, pero simplemente estaba demasiado amodorrada contra el muchacho para inclinarse y alcanzar su copa. Al menos por el momento. No tardó mucho en probar el sabor de la uva de la boca del muchacho y sonrió con sorna al notar el mordisco, llevando una de sus manos hacia su nunca, mientras la otra alcanzaba la que estaba sobre su propio muslo. Soltó un jadeo involuntario cuando se separó de ella para seguir mordiendo allá donde alcanzaba. "Ya. No puedes controlarte." murmuró. Y encima hacía que ella también se descontrolara y eso no era bueno, ¿dónde había quedado el cansancio? Completamente relegado. Se apartó de él y se acercó a la mesa auxiliar gateando ligeramente, dio un sorbo a su vino y tomó una fresa antes de volver junto a Sparks. Esta vez de frente, colocando una rodilla a cada lado del chico sin llegar a sentarse sobre él o acercarse del todo. Para ello se recogió ligeramente el vestido y lo dejó caer sobre uno de los lados, dejando la pierna al descubierto. "No te vendría mal un poco de contención." mintió llevándose la fruta bañada en chocolate hacia la boca, dándole un leve mordisco.
Le observó beber y por un momento ella también deseó hacerlo, pero simplemente estaba demasiado amodorrada contra el muchacho para inclinarse y alcanzar su copa. Al menos por el momento. No tardó mucho en probar el sabor de la uva de la boca del muchacho y sonrió con sorna al notar el mordisco, llevando una de sus manos hacia su nunca, mientras la otra alcanzaba la que estaba sobre su propio muslo. Soltó un jadeo involuntario cuando se separó de ella para seguir mordiendo allá donde alcanzaba. "Ya. No puedes controlarte." murmuró. Y encima hacía que ella también se descontrolara y eso no era bueno, ¿dónde había quedado el cansancio? Completamente relegado. Se apartó de él y se acercó a la mesa auxiliar gateando ligeramente, dio un sorbo a su vino y tomó una fresa antes de volver junto a Sparks. Esta vez de frente, colocando una rodilla a cada lado del chico sin llegar a sentarse sobre él o acercarse del todo. Para ello se recogió ligeramente el vestido y lo dejó caer sobre uno de los lados, dejando la pierna al descubierto. "No te vendría mal un poco de contención." mintió llevándose la fruta bañada en chocolate hacia la boca, dándole un leve mordisco.
R. Lena Gallagher• Líder Bithaen • - × Edad : 33
× Mensajes : 1266
× Fecha de inscripción : 27/01/2013
Re: Outroduction nightmare ▬ Will. INS.
—¿Una patada dónde?— preguntó, más por reto que por curiosidad. Le gustaba su físico, todo había que decirlo, pero ella ya sabía de sobra qué cosas de ella le gustaban aún más. Se atrevió a decirlas hace tiempo, y esperaba que las tuviera grabadas en la memoria porque no las iba a repetir. —Sabes de sobra que me gustas por muchas cosas más— aunque ahora ese ''me gustas'' quedaba más que pequeño después de todo lo que había pasado con el paso de los días, y después de todo lo que había descubierto que podía sentir. Que tenía puntos concretos de su cuerpo que le volvían loco, vale, pero también existían más cosas, no era el centro de todo. De todas formas, William se codeaba con gente superficial de vez en cuando... si no, no se habría llevado a tantas chicas a la cama. —Ibas con escote. No como la noche de la cita de San Valentín, que ahí casi se te ve hasta el ombligo... pero con el suficiente para que se te viera el canalillo y dejaras mucho a la imaginación— si su boca hubiera actuado sola, cuando la vio se le habría caído de la sorpresa. —Tú me incitas, esto es así— todo por culpa de la tensión sexual que se mantuvo durante tanto tiempo. Ahora ya no estaba, al menos no siempre -en momentos de enfado, o de mucho tiempo sin hacer nada sí que aparecía esa tensión- porque ahora podía tocarla sin miramientos, y eso sólo conseguía que lo incitara aún más a tenerla contra él todo lo posible.
—No, no puedo controlarme... y es culpa tuya— sin entrar en lo moñas, ese era el efecto que causaba en él y no podía evitarlo. Cada contacto con su piel era como un estallido eléctrico de sensaciones que, como un masoca, le hacían buscar más. Seguro que si luego metía la mano en el agua, terminaría por bullir en cuestión de segundos, o de minutos. Observó su cuerpo en una mirada rápida y de reojo en cuanto gateó un poco para coger el vino y la fresa con chocolate. Que la mordiera, que estuviera frente suya y que, encima, estuviese cerca en esa posición sólo conseguía que las cosas empeoraran aún más. —Créeme, me estoy conteniendo un poco... pero si sigues así voy a dejar de hacerlo— murmuró, dándole a entender que si seguía incitándole con cualquier movimiento que a sus ojos era provocativo le iba a importar un comino dónde estaban y que les podrían ver desde la ventana, o desde cualquier otro sitio. Miró el corte de su vestido, que le dejaba la pierna completamente al descubierto, y se le ocurrió una pregunta absurda que sólo supo preguntar con una sonrisa maliciosa en los labios. —¿Me vas a decir qué ropa interior te has puesto hoy o vas a dejar que lo mire yo por mi propia cuenta?—
—No, no puedo controlarme... y es culpa tuya— sin entrar en lo moñas, ese era el efecto que causaba en él y no podía evitarlo. Cada contacto con su piel era como un estallido eléctrico de sensaciones que, como un masoca, le hacían buscar más. Seguro que si luego metía la mano en el agua, terminaría por bullir en cuestión de segundos, o de minutos. Observó su cuerpo en una mirada rápida y de reojo en cuanto gateó un poco para coger el vino y la fresa con chocolate. Que la mordiera, que estuviera frente suya y que, encima, estuviese cerca en esa posición sólo conseguía que las cosas empeoraran aún más. —Créeme, me estoy conteniendo un poco... pero si sigues así voy a dejar de hacerlo— murmuró, dándole a entender que si seguía incitándole con cualquier movimiento que a sus ojos era provocativo le iba a importar un comino dónde estaban y que les podrían ver desde la ventana, o desde cualquier otro sitio. Miró el corte de su vestido, que le dejaba la pierna completamente al descubierto, y se le ocurrió una pregunta absurda que sólo supo preguntar con una sonrisa maliciosa en los labios. —¿Me vas a decir qué ropa interior te has puesto hoy o vas a dejar que lo mire yo por mi propia cuenta?—
William H. Sparks• Líder Besten • - × Edad : 34
× Mensajes : 1272
× Fecha de inscripción : 11/12/2012
Re: Outroduction nightmare ▬ Will. INS.
"No quieres saberlo." respondió echando una vista hacia abajo de manera significativa. También se la podría dar repetidas veces en su bonito y perfecto trasero, pero la otra le dolería más, de eso no cabía duda. Por suerte para él, era una broma. "Lo sé. Me acuerdo perfectamente." respondió, levantando la mirada con calidez. Las ventajas de ser un genio era que podías recordar cosas con mucha más facilidad, por no decir que si se lo planteaba hasta podría repetir sus propias palabras, pero no le gustaba abusar de su innata habilidad mental. "Es que tú tienes mucha imaginación, que es distinto. Si por ver un canalillo te pones tonto... pfff." aunque si era el suyo que lo hiciera siempre que quisiera que de momento no tenía ningún problema. "Ah. Eso es otra cosa." pero estaba segura de no ser la única que le incitaba, porque no iba con él.
"Estás cogiendo la mala costumbre de culparme de todas las veces que te pones caliente conmigo. Cuando a veces te buscas tú solito la situación. " primero que si en la biblioteca con sus camisetas normales y corrientes de todos los días; ahora con los vestidos que escogía para verle. La cita fue idea de él, y por supuesto también fue cosa suya el reto. Y lo de ahora... bueno, era una gala ¿qué esperaba? Quizás prefería que llevara otro vestido que no le incitara o hiciera funcionar su perversa imaginación. "No estoy haciendo nada para incitarte... " mentira, porque por la posición en la que estaban ya era una posición física retadora, estimulante. Se llevó el bocado de fresa restante y se pasó el pulgar por el labio inferior, despacio, quitándose el resto de chocolate y jugo de fresa. La pregunta la pilló un poco por sorpresa, pero levantó la comisura de sus labios, inclinándose hacia el oído de William mientras posaba las manos sobre sus hombros. "No llevo..." susurró por lo bajo, dejando una caricia sobre su cuello con la punta de su nariz. Le había mentido por supuesto, pero la reacción corporal de Sparks se le quedaría a fuego en la cabeza. Al final no le quedó más remedio que reírse con suavidad y con cierta ligereza se levantó la tela roja del vestido para mostrar un poco del encaje negro. "¿Satisfecho?" murmuró alzando ambas cejas, dejando caer la tela de nuevo.
"Estás cogiendo la mala costumbre de culparme de todas las veces que te pones caliente conmigo. Cuando a veces te buscas tú solito la situación. " primero que si en la biblioteca con sus camisetas normales y corrientes de todos los días; ahora con los vestidos que escogía para verle. La cita fue idea de él, y por supuesto también fue cosa suya el reto. Y lo de ahora... bueno, era una gala ¿qué esperaba? Quizás prefería que llevara otro vestido que no le incitara o hiciera funcionar su perversa imaginación. "No estoy haciendo nada para incitarte... " mentira, porque por la posición en la que estaban ya era una posición física retadora, estimulante. Se llevó el bocado de fresa restante y se pasó el pulgar por el labio inferior, despacio, quitándose el resto de chocolate y jugo de fresa. La pregunta la pilló un poco por sorpresa, pero levantó la comisura de sus labios, inclinándose hacia el oído de William mientras posaba las manos sobre sus hombros. "No llevo..." susurró por lo bajo, dejando una caricia sobre su cuello con la punta de su nariz. Le había mentido por supuesto, pero la reacción corporal de Sparks se le quedaría a fuego en la cabeza. Al final no le quedó más remedio que reírse con suavidad y con cierta ligereza se levantó la tela roja del vestido para mostrar un poco del encaje negro. "¿Satisfecho?" murmuró alzando ambas cejas, dejando caer la tela de nuevo.
R. Lena Gallagher• Líder Bithaen • - × Edad : 33
× Mensajes : 1266
× Fecha de inscripción : 27/01/2013
Re: Outroduction nightmare ▬ Will. INS.
—Uh— fue lo único que dijo tras su respuesta y su pequeño vistazo. Una mueca apareció en su rostro, acordándose de la patada que Brooke le dio que, aunque no fue muy fuerte por su falta de fuerzas aquel día, sí que fue algo dolorosa. —No sé que tenéis todas en contra de eso, luego lo estáis pidiendo a gritos— bromeó, aunque quién sabe si se tragaría sus propias palabras. Menos mal que William se tomó eso de la patada como una broma, y de que no sólo estaba con ella por su físico, sino se quedaría sin hijos para el resto de su vida. —No esperaba más de ti— si tan genio era, era obvio que iba a acordarse. Y menos mal, porque si se le olvidaba ya no lo diría nunca más. —Si veo un buen canalillo, no cualquiera— estaba claro que un canalillo de una chica que no tenía pechos no le iba a llamar nada en absoluto, por eso como Lena tenía suficientes para contentarle, estaba claro que se fijó de sobra. —Puede que te incitara un poquito de vez en cuando con el gel de chocolate— confesó, haciéndose el completo inocente. No era un secreto que le volvía loca ese aroma, así que se aprovechó un poquito de ello.
—Oh, claro, ahora es culpa mía tener buenas vistas... y eso que llevo gafas, ¿sabes?— intentó excusarse, aunque no es que sirviera de mucho. Bien era sabido que sólo utilizaba las gafas para leer, porque para las demás cosas veía perfectamente sin necesidad incluso de lentillas. Era el cansancio en los ojos lo que a veces le obligaba a ponerse las gafas. —¿Que no estás haciendo nada, dices? No, claro que no. Creo que si te abres un poco más de piernas podré verte hasta el alma— no se veía nada por estar de rodillas, pero puede que si se agachaba o incluso un leve movimiento podría hacerle ver. El hecho de que se comiera la fresa de una forma sensual e insinuante tampoco es que ayudara mucho. Estaba claro que le estaba incitando demasiado, y eso luego traería unas consecuencias. Y que le susurrara aquello en el oído, muchísimo menos. Abrió los ojos, sin creérselo del todo. —¿Enserio?— preguntó, a la par emocionado y a la par molesto porque se había atrevido a ir sin ropa interior por allí, aunque eso le diera a entender sus intenciones con él desde un principio. Miró cómo se levantó un poco la tela del vestido y vio parte de la ropa interior de encaje negro que llevaba. Frunció los labios, ahora no sabía si estar contento o más bien desilusionado por eso. —Eres una mentirosa y una mata-ilusiones— bufó, antes de atrapar sus labios con fuerza, viniéndole al instante el sabor de la fresa y del chocolate.
—Oh, claro, ahora es culpa mía tener buenas vistas... y eso que llevo gafas, ¿sabes?— intentó excusarse, aunque no es que sirviera de mucho. Bien era sabido que sólo utilizaba las gafas para leer, porque para las demás cosas veía perfectamente sin necesidad incluso de lentillas. Era el cansancio en los ojos lo que a veces le obligaba a ponerse las gafas. —¿Que no estás haciendo nada, dices? No, claro que no. Creo que si te abres un poco más de piernas podré verte hasta el alma— no se veía nada por estar de rodillas, pero puede que si se agachaba o incluso un leve movimiento podría hacerle ver. El hecho de que se comiera la fresa de una forma sensual e insinuante tampoco es que ayudara mucho. Estaba claro que le estaba incitando demasiado, y eso luego traería unas consecuencias. Y que le susurrara aquello en el oído, muchísimo menos. Abrió los ojos, sin creérselo del todo. —¿Enserio?— preguntó, a la par emocionado y a la par molesto porque se había atrevido a ir sin ropa interior por allí, aunque eso le diera a entender sus intenciones con él desde un principio. Miró cómo se levantó un poco la tela del vestido y vio parte de la ropa interior de encaje negro que llevaba. Frunció los labios, ahora no sabía si estar contento o más bien desilusionado por eso. —Eres una mentirosa y una mata-ilusiones— bufó, antes de atrapar sus labios con fuerza, viniéndole al instante el sabor de la fresa y del chocolate.
William H. Sparks• Líder Besten • - × Edad : 34
× Mensajes : 1272
× Fecha de inscripción : 11/12/2012
Re: Outroduction nightmare ▬ Will. INS.
"Es la zona más sensible que tenéis y es donde no queréis que nadie os dé." encogió los hombros. Pero de cualquier forma, Lena sería mucho más leal a sus conocimientos sobre la pelea y la entrepierna sería la última zona en la que pegaría a un tío. Principalmente porque eso la haría como el resto de las chicas indefensas que sólo podían acudir a ese ataque como salida, mientras que ella era distinta. Ladeó la cabeza y aceptó sus palabras. A todo tío le gustaba un buen escote y era evidente que Sparks no era ninguna excepción, aunque seguía pensando que dejaba vagar demasiado la imaginación en algunos momentos. "Un poco..." bufó, sacudiendo la cabeza. Tenía que estar de coña porque Rebecca los días que William se ponía el gel estaba muy inquieta en clase, en la biblioteca o donde fuera. Solía mover la pierna, mordisquear los bolígrafos o darle al botón incesantemente. Era un suplicio y se le nublaba completamente la razón, de hecho esos días debía de estar más cortante y arisca porque hacía todo lo que podía por no echarse sobre él o algo similar. "Te gustaba verme sufrir por tu culpa. Me intentabas devolver lo del escote o las minifaldas." sentenció.
Se echó a reír un poco al escucharle, encogiendo los hombros como si ella realmente no tuviera la culpa. "Pobre." murmuró divertida con la situación. Pero no era como si fuera un inocentón, porque para ser honestos Will era peor que ella en todos los sentidos. Él tocaba, rozaba, mordía e incitaba físicamente hablando; Lena no tenía que hacer nada de eso, sólo mostrar y la cabecita del chico hacía el resto sin tener que esforzarse demasiado. "Lo dices como si no la hubieses visto nunca." y no era precisamente cierto, así que le miró con inocencia fingida. Pero al contrario de lo que pudiera pensar cualquiera que les viera en esa situación, él había comenzado con aquello, buscándola. Capaz sería, pero no hubiese estado toda la noche sin ella, si no que se había desprovisto de la lencería momentos antes de saber que iba a estar a solas con él. Por desgracia eso era algo que no había podido controlar. "Exa...." ni tiempo le dio a terminar de hablar, pues los labios del inglés fueron demandantes y Rebecca no pudo resistirse a él. Le besó con ansía, saboreándole y pegó su cuerpo por completo al del muchacho, rodeándole con ambos brazos. Enterró las manos en su pelo a medida que el beso subía de intensidad y cuando notó que le faltaba el aire, se separó dejando un jadeo contra sus labios. "Me hubieses matado de no haber ido con ella." murmuró, jugando. Rozaba sus bocas y luego se separaba un poco, respirando entrecortadamente sin poder evitarlo.
Se echó a reír un poco al escucharle, encogiendo los hombros como si ella realmente no tuviera la culpa. "Pobre." murmuró divertida con la situación. Pero no era como si fuera un inocentón, porque para ser honestos Will era peor que ella en todos los sentidos. Él tocaba, rozaba, mordía e incitaba físicamente hablando; Lena no tenía que hacer nada de eso, sólo mostrar y la cabecita del chico hacía el resto sin tener que esforzarse demasiado. "Lo dices como si no la hubieses visto nunca." y no era precisamente cierto, así que le miró con inocencia fingida. Pero al contrario de lo que pudiera pensar cualquiera que les viera en esa situación, él había comenzado con aquello, buscándola. Capaz sería, pero no hubiese estado toda la noche sin ella, si no que se había desprovisto de la lencería momentos antes de saber que iba a estar a solas con él. Por desgracia eso era algo que no había podido controlar. "Exa...." ni tiempo le dio a terminar de hablar, pues los labios del inglés fueron demandantes y Rebecca no pudo resistirse a él. Le besó con ansía, saboreándole y pegó su cuerpo por completo al del muchacho, rodeándole con ambos brazos. Enterró las manos en su pelo a medida que el beso subía de intensidad y cuando notó que le faltaba el aire, se separó dejando un jadeo contra sus labios. "Me hubieses matado de no haber ido con ella." murmuró, jugando. Rozaba sus bocas y luego se separaba un poco, respirando entrecortadamente sin poder evitarlo.
R. Lena Gallagher• Líder Bithaen • - × Edad : 33
× Mensajes : 1266
× Fecha de inscripción : 27/01/2013
Re: Outroduction nightmare ▬ Will. INS.
—Si es la zona más sensible que tenemos, es obvio que no queremos que nadie nos de ahí— sabía de casos en los que hombres se habían desmayado por una patada en las pelotas, incluso vomitado. A William no le había pasado nunca nada de eso, pero no era algo que le gustaría especialmente que le pasara. El dolor era más que intenso, mucho peor que un puñal en la rodilla, o algo parecido. Sonrió al ver que con algunas cosas exageraba, y con otras más bien era todo lo contrario. El pack de Axe no sólo venía con desodorante, sino también con champú de chocolate, dejando siempre descolocada a más de una. En especial, a la rubia que tenía delante. Lo mejor de todo es que el humor de Rebecca cuando se acercaba a decirle alguna cosa si se sentaban juntos disminuía rápidamente, y sabía la razón. —Me gustaba ver que tenías ganas de lanzarte sobre mí y hacerme de todo, pero te contenías por conservar la amistad— añadió, como si eso fuese un acontecimiento épico en la historia británica.
Abrió la boca fingiendo sorpresa e incluso indignación. —¿Sólo eres capaz de decirme ''pobre'' cuando la culpa es tuya y sólo tuya? Descarada— y se hizo el ofendido, como si eso ayudara a la causa. Lena con tan sólo su presencia ya conseguía volverle loco, era cierto. Sin embargo, para aumentar su locura sólo tenía que incitarle, hacer algo que le obligara a sacar su instinto animal. Desde alguna caricia, hasta la mano en la pierna como en el coche. No era la única que se aprovechaba, porque él también utilizaba las caricias, los besos y los mordiscos a su placer. —Vale, es cierto. Te lo he visto todo. No hay nada de tu cuerpo que me sorprenda ya, me lo sé de arriba a abajo— comentó, haciendo un caminito por su pierna descubierta con dos dedos, acariciándola al mismo tiempo. Lo hacía despacio, suave, para que sintiera las cosquillas. Si él había comenzado, lo que tenía claro es que quería terminarlo todo ahora mismo. Que se acercara él ante ese beso demandante sólo hizo que sintiera muchas ganas de que todo empezara y acabara al mismo tiempo. Cualquiera que los viera ahora mismo, pensarían que estaban locos. A él se la sudaba por completo, demasiado ocupado estaba dándose el lote con su novia. Tenía la respiración entrecortada y estaba recogiendo el aire suficiente porque lo que tenía claro es que ya no iba a parar. —Realmente me lo pensaría. Aún así, me gusta el encaje negro... mucho— sus jueguecitos empeoraban las cosas, y ya sentía las ganas de tirarla sobre la hamaca sin ningún reparo. ¿Cómo conseguía que perdiese la razón en cuestión de minutos? —Estás consiguiendo que me importe una mierda que estemos aquí fuera, ¿sabes?—
Abrió la boca fingiendo sorpresa e incluso indignación. —¿Sólo eres capaz de decirme ''pobre'' cuando la culpa es tuya y sólo tuya? Descarada— y se hizo el ofendido, como si eso ayudara a la causa. Lena con tan sólo su presencia ya conseguía volverle loco, era cierto. Sin embargo, para aumentar su locura sólo tenía que incitarle, hacer algo que le obligara a sacar su instinto animal. Desde alguna caricia, hasta la mano en la pierna como en el coche. No era la única que se aprovechaba, porque él también utilizaba las caricias, los besos y los mordiscos a su placer. —Vale, es cierto. Te lo he visto todo. No hay nada de tu cuerpo que me sorprenda ya, me lo sé de arriba a abajo— comentó, haciendo un caminito por su pierna descubierta con dos dedos, acariciándola al mismo tiempo. Lo hacía despacio, suave, para que sintiera las cosquillas. Si él había comenzado, lo que tenía claro es que quería terminarlo todo ahora mismo. Que se acercara él ante ese beso demandante sólo hizo que sintiera muchas ganas de que todo empezara y acabara al mismo tiempo. Cualquiera que los viera ahora mismo, pensarían que estaban locos. A él se la sudaba por completo, demasiado ocupado estaba dándose el lote con su novia. Tenía la respiración entrecortada y estaba recogiendo el aire suficiente porque lo que tenía claro es que ya no iba a parar. —Realmente me lo pensaría. Aún así, me gusta el encaje negro... mucho— sus jueguecitos empeoraban las cosas, y ya sentía las ganas de tirarla sobre la hamaca sin ningún reparo. ¿Cómo conseguía que perdiese la razón en cuestión de minutos? —Estás consiguiendo que me importe una mierda que estemos aquí fuera, ¿sabes?—
William H. Sparks• Líder Besten • - × Edad : 34
× Mensajes : 1272
× Fecha de inscripción : 11/12/2012
Re: Outroduction nightmare ▬ Will. INS.
La confesión de Will -si es que se podía llamar así- no le traía por sorpresa ninguna, porque le conocía lo suficientemente bien como para haber deducido que lo hacía aposta tras cuatro años sentándose el uno al lado del otro. Había sido una dulce tortura con la que había podido resistirse día tras día hasta que las cosas se desbordaron por su propio peso. Ni siquiera estaba segura de lo que hubiese pasado de haberle interceptado mucho antes, posiblemente arrepentimiento por su parte ahora que sabía cómo habían acabado. "Genial, encima sabías que me tenías a punto y no hacías nada tampoco." carraspeó y se rió un poco, porque ahora era un hecho gracioso. "¿No has pensado que quizás no siempre fue por la amistad?" al principio ya le había dicho que fue porque le intimidaba su aura de ligón, después empezó a fijarse más en Evan y relegó a Will completamente, más tarde apareció Chiara y ahí no iba a meterse y, finalmente, sí, la amistad jugó un papel importante para que no quisiera destrozarla tras cuatro años aguantando la atracción.
"Sí." contestó con rotundidad. Era su novio y podía tomarse el lujo de ser todo lo descarada que le diera la gana. Además, en el fondo se quejaba de absoluto vicio porque no era precisamente que él no quisiera aquella situación, porque si ella no le daba algo, él la buscaba rápidamente. Y rara vez no había obtenido buenos resultados, precisamente. "No sé si eso es bueno o malo." comentó ceñuda, entiendo que podría cansarse de ella, de su cuerpo, de la monotonía. No es como si no confiara en Will, pero estaba claro que no podía darle una sorpresa porque a no ser que se perforara algo o se hiciera otro tatuaje, no había manera de hacerle mantener viva la intriga con respecto a su cuerpo. Igualmente era una tontería, porque sabía de buena mano que a Sparks le encantaba lo que tenía entre manos y ya se conocía de pies a cabeza. "¿Ah sí? No lo había notado." murmuró dejando un suave beso en la barbilla del muchacho. Estaba claro que el encaje negro le encantaba porque el último modelo que él le había regalado era precisamente de esa tela y color. Ascendió sus labios con una leve caricia por la piel y volvió a besarle, esta vez rozando el labio inferior del chico. "Mucho estabas tardando en que no te importara." susurró dejando que sus manos ascendieran en una lenta caricia sobre su camisa, parándose inequívocamente sobre la cinturilla del pantalón de William. "Pero lo que es más preocupante es que a mí tampoco me importa." sentenció con la voz ronca, presa de la excitación, mordiéndole con cierta saña el labio que antes había besado casi con dulzura.
"Sí." contestó con rotundidad. Era su novio y podía tomarse el lujo de ser todo lo descarada que le diera la gana. Además, en el fondo se quejaba de absoluto vicio porque no era precisamente que él no quisiera aquella situación, porque si ella no le daba algo, él la buscaba rápidamente. Y rara vez no había obtenido buenos resultados, precisamente. "No sé si eso es bueno o malo." comentó ceñuda, entiendo que podría cansarse de ella, de su cuerpo, de la monotonía. No es como si no confiara en Will, pero estaba claro que no podía darle una sorpresa porque a no ser que se perforara algo o se hiciera otro tatuaje, no había manera de hacerle mantener viva la intriga con respecto a su cuerpo. Igualmente era una tontería, porque sabía de buena mano que a Sparks le encantaba lo que tenía entre manos y ya se conocía de pies a cabeza. "¿Ah sí? No lo había notado." murmuró dejando un suave beso en la barbilla del muchacho. Estaba claro que el encaje negro le encantaba porque el último modelo que él le había regalado era precisamente de esa tela y color. Ascendió sus labios con una leve caricia por la piel y volvió a besarle, esta vez rozando el labio inferior del chico. "Mucho estabas tardando en que no te importara." susurró dejando que sus manos ascendieran en una lenta caricia sobre su camisa, parándose inequívocamente sobre la cinturilla del pantalón de William. "Pero lo que es más preocupante es que a mí tampoco me importa." sentenció con la voz ronca, presa de la excitación, mordiéndole con cierta saña el labio que antes había besado casi con dulzura.
R. Lena Gallagher• Líder Bithaen • - × Edad : 33
× Mensajes : 1266
× Fecha de inscripción : 27/01/2013
Re: Outroduction nightmare ▬ Will. INS.
—En realidad a veces me cuestiono mi propia inteligencia— comentó, quedándose pensativo. Se sentía completamente idiota, porque cuando le ponían las cosas en bandeja se volvía tonto y ni aceptaba siquiera la oportunidad. Supongo que estuvo tanto tiempo ignorando lo fácil que sólo se interesaba por lo difícil. Eso explicaría miles de situaciones, como la de Lena en tiempo pasados... o incluso la de Audrey. Vamos, las dos estaban buenas y durante mucho tiempo intentó nada con ninguna, pero eso no incluía coquetear un poco o mirar donde no debía. —Definitivamente soy idiota— bufó, acordándose entonces de todas las oportunidades perdidas que habrían incrementado su lista a gran escala. No obstante, no quitaba la parte graciosa del asunto, sobre todo porque eso no iba a cambiar en él. Seguiría buscando los retos difíciles y sólo se aprovecharía de los fáciles si de verdad se daba cuenta de ellos. —Supongo que hubieron más cosas aparte de conservar la amistad... pero no quiero pensar en ello— cualquier cosa podría pensar, cosas que no le gustaban en absoluto. Antes le daban igual, pero ahora estaba más que claro que le importaban e incluso le llegarían a molestar en cierto punto. También es cierto que él tampoco puso nada de su parte, ya que se dedicó en todo ese tiempo a estar con otras e incluso salir con Chiara, hasta que prácticamente se cansó de resistirse y de ignorarlo todo.
—¿Es bueno o malo?— preguntó, metiéndole la duda en la cabeza tal y como ella había hecho antes con él, como venganza. Ahora ella misma podría sacar conclusiones sobre si lo que había dicho era bueno o, por el contrario, era algo malo. Ya se sabe que tener más que visto un cuerpo puede cansar con el tiempo, o puede que más bien eso consiga incrementar la libido o saber en qué sitios tocar o acariciar. Todo era relativo, y todo tenía un camino. Igualmente ella podía también hacer lo mismo, es decir, tener cansada la imagen de su cuerpo. Que es posible que si que se encuentre algún día con que lleva algún que otro tatuaje más, pero eso no quita que su anatomía fuera a cambiar a sobremanera. De todas maneras, William disfrutaba como un loco de lo que la rubia le ofrecía, y por el momento estaba cómodo con eso. Era sorprendente que después de tantos años de pasar de cama en cama, aún no se cansara del cuerpo de la rubia. Que lo incitara, que lo besara en la mandíbula en pequeños roces de labios, que le acariciara y que dejara sus manos en la cinturilla del pantalón no ayudó a que le siguiera importando muy poco donde estaban, más bien sus pupilas terminaron por dilatarse más de lo necesario gracias a la noche y a la excitación, como si fuera un felino dispuesto a cazar a su presa. Apartó la cabeza un poco para que dejara de morderle el labio inferior y la miró un segundo, con el ceño fruncido. —¿Tampoco te importa?— preguntó, sabiendo instantaneamente su respuesta. Y ese fue motivo suficiente para volver a aprisionar los labios de la rubia antes de prácticamente tirarse encima suya.
—¿Es bueno o malo?— preguntó, metiéndole la duda en la cabeza tal y como ella había hecho antes con él, como venganza. Ahora ella misma podría sacar conclusiones sobre si lo que había dicho era bueno o, por el contrario, era algo malo. Ya se sabe que tener más que visto un cuerpo puede cansar con el tiempo, o puede que más bien eso consiga incrementar la libido o saber en qué sitios tocar o acariciar. Todo era relativo, y todo tenía un camino. Igualmente ella podía también hacer lo mismo, es decir, tener cansada la imagen de su cuerpo. Que es posible que si que se encuentre algún día con que lleva algún que otro tatuaje más, pero eso no quita que su anatomía fuera a cambiar a sobremanera. De todas maneras, William disfrutaba como un loco de lo que la rubia le ofrecía, y por el momento estaba cómodo con eso. Era sorprendente que después de tantos años de pasar de cama en cama, aún no se cansara del cuerpo de la rubia. Que lo incitara, que lo besara en la mandíbula en pequeños roces de labios, que le acariciara y que dejara sus manos en la cinturilla del pantalón no ayudó a que le siguiera importando muy poco donde estaban, más bien sus pupilas terminaron por dilatarse más de lo necesario gracias a la noche y a la excitación, como si fuera un felino dispuesto a cazar a su presa. Apartó la cabeza un poco para que dejara de morderle el labio inferior y la miró un segundo, con el ceño fruncido. —¿Tampoco te importa?— preguntó, sabiendo instantaneamente su respuesta. Y ese fue motivo suficiente para volver a aprisionar los labios de la rubia antes de prácticamente tirarse encima suya.
William H. Sparks• Líder Besten • - × Edad : 34
× Mensajes : 1272
× Fecha de inscripción : 11/12/2012
Página 1 de 1.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.
Mar Sep 02, 2014 9:51 pm por Invitado
» Homenum Revelio {Af. Normal} {Predeterminados libres}
Lun Jul 28, 2014 2:06 pm por Invitado
» Four Districts |Apertura| Normal
Lun Mayo 05, 2014 6:15 pm por Invitado
» Cambio de botón de B. Element.
Jue Mayo 01, 2014 1:06 pm por Invitado
» O.W. [Foro RPG Naruto/Inuyasha/Saint Seiya] normal
Sáb Abr 26, 2014 3:34 pm por Invitado
» The Coven's Conjuring [Brujería, Voodoo, Cazadores] - [AHS : Coven AU] - Cambió de Botón [New Skin] - Elite
Sáb Abr 12, 2014 8:43 pm por Invitado
» University of Cambridgre +18 # NUEVO -Normal
Miér Abr 09, 2014 10:04 am por Invitado
» Memento Mori RPG (tumblr promocional reapertura)
Miér Mar 26, 2014 8:50 am por Invitado
» You Just Have To Survive { Vampiros RPG } ▌ Afiliación Elite
Lun Mar 03, 2014 12:40 pm por Invitado